Epigrama [Mario Benedetti]
Después de unos días muy bonitos, retomo estos versos de Mario Benedetti (aunque ya publicados en un post anterior) para compensar la declaración de la imagen anterior. Porque cuando esta niña se pone así de dulce, señores, dan ganas de comérsela a besos...
Como esplende un sesentón cuando logra vencer por dos
pulgadas al bisoño que intentó conseguir el único
asiento libre
como bienquiere el contribuyente silvestre a la cajera
número cuatro en el momento de enfrentarla tras dos
horas de cola
como acoge el deudor la noticia de que ha fallecido su
acreedor más implacable
como suele compungirse la buena gente si el locutor no
advierte a tiempo la traicionera errata que lo acecha
en el cable llegado a última hora
como el prójimo que permanece enjabonado bajo la
ducha a causa de un corte imprevisto y al cabo de
tres minutos se solaza al advertir que el agua vuelve
a manar sin usura
como el chófer que se reconcilia con la vida tras esquivar
limpiamente un desbocado camión con tres
containers
como el adolescente que ama los decibeles más que a sí
mismo
así trifenia mía aproximadamente así suelo
quererte
1 comentario:
Como me levanto cada mañana pensando en el momento de tú llamada como un niño con zapatos nuevos,
como me miras inmóvil sin decir ni una palabra, solo me miras, y yo tímida agacho la cabeza,
como duermes horas y horas mientras yo te observo o te despierto porque necesito oir tu voz,
como discutimos por tonterías que acaban con final feliz,
como hablamos con sinceridad y sin tapujos de grandes temas de la vida, de grandes momentos,
como un dulce beso puede despertar tantas sensaciones a la vez,
como te echo de menos…
así trifenio mío aproximadamente así suelo quererte.
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